Paté cremoso de pollo | sin lactosa

Domingo y toca publicación para el reto #Asaltablogs, este mes ha tocado asaltar el blog de Lola, Pequeños accidentes. Me encanta el espíritu que transmite el blog, Lola practica la filosofía hygge y tanto sus recetas como sus textos transmiten tranquilidad y búsqueda de la felicidad. 

En uno de sus post, Lola Redondo nos da los ingredientes para elaborar la receta de la felicidad y me ha gustado tanto, que lo dejo aquí para que nos haga a todos reflexionar. Os aconsejo que os déis una vuelta por su blog porque os va a encantar.

1.- Sé sincero contigo.

2.- Deja de quejarte.

3.- Abandona la crítica, tanto hacia los demás como a ti mismo.

4.- Deja de culparte o de buscar culpables.

5.- Si vas a hablar mal de ti, mejor cállate.

6.- Vive con tus propias expectativas y deja de buscar la aprobación de los demás en lo que haces.

7.- Reconoce tus límites y tus talentos.

8.- Di No cuando quieras decir No.

9.- Siente el permiso para descansar.

10.- Felicítate o prémiate cuando consigas un objetivo.

11.- Abandona el querer controlarlo todo y querer llevar siempre la razón.

12.- Ponte en la acción.

13.- Acepta y no te resignes. 

14.- Cuida tu cuerpo y mente.

15.- Sal de lo establecido y vive a tu manera.

16.- Habla de tus alegrías y rompe el hábito de hablar de tus problemas.

17.- Escucha a tu intuición.

18.- Vive el aquí y ahora.

19.- Perdónate y perdona a los demás. 

20.- Tú tienes el poder de vibrar en sintonía con el Universo. 

Entre todas las recetas, he escogido este paté cremoso de pollo sin lactosa. La verdad es que lo tuve claro enseguida, dentro de nada tenemos aquí la Navidad y me pareció una receta interesante, económica y muy rica. Cuando leí que la receta es de Jamie Oliver, ya no tuve duda de que me iba a gustar y me fui a comprar los ingredientes.

Con este paté cremoso de pollo sin lactosa, tenemos un aperitivo casero y suave, con mucha menos sal que el comercial y muy rico en hierro. Si lo envasamos en tarros de cristal con tapa, puede ser un detalle perfecto y original para regalar. Una cosa os digo, está mucho más rico conforme pasa el tiempo porque coge más sabor.

Os dejo el vídeo con el paso a paso y ya sabéis que estáis invitados a mi canal de Youtube, no olvidéis activar la campanita para estar al tanto de todo lo que publique.

250 g de mantequilla sin lactosa

2 cebolletas

2 dientes de ajo

2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

1/2 manojo de tomillo fresco o un puñadito de seco

1/2 kg de hígados de pollo

1/2 cucharadita de nuez moscada

1/2 vasito de brandy

sal y pimienta molida

pimienta en grano

- Derretimos la mitad de la mantequilla en un cazo y reservamos el resto en la nevera.

- Picamos las cebollas y los ajos, los sofreímos en aceite de oliva. Añadimos el tomillo y cocinamos hasta que la cebolla empiece a coger color.

- Agregamos los hígados de pollo y la nuez moscada, salpimentamos y cocinamos hasta que los hígados cojan un tono marrón pero rosa por el centro.

- Agregamos el brandy y cocinamos unos minutos. Lo ideal es flambearlo y esperar hasta que se apague el fuego y se evapore el alcohol.

- Echamos todo en un robot de cocina, junto con la mantequilla restante cortada en cubitos y trituramos hasta que quede suave. Lo probamos y rectificamos de sal y pimienta. Debemos tner en cuenta que al enfriarse, el sabor será más suave.

- Vertemos la mezcla en los recipientes y dejamos en la nevera para que se enfríen.

- Desgrasamos la mantequilla derretida, quitándole la grasa superficial con una cuchara. Repartimos sobre los recipientes de paté y encima unas bolitas de pimienta. Volvemos a dejar en la nevera para que se endurezca la mantequilla.

- La capa de mantequilla hará que el paté de pollo nos dure bastante tiempo en la nevera sin resecarse.